Aunque el incremento en el comercio electrónico es algo evidente, su alcance global, así como su constante crecimiento hace que esta sea una de las tendencias globales con mayor relevancia. Y si por algo se esta destacando este tipo de comercio es por la incorporación de nuevas tecnologías como el caso de la inteligencia artificial.
La influencia de la inteligencia artificial en el comercio electrónico, no solo podría transformar millones de transacciones online que se producen todos los días, sino también el comportamiento de los compradores.
Es posible que la limitación más importante en el Ecommerce es la carga para el usuario del consumidor al elegir y luego poner a punto una palabra clave que identifique o describa el producto que desean comprar. Si elijen la palabra clave adecuada, los motores de búsqueda les muestran resultados relevantes.
De no ser así, tendrán que intentar varias veces hasta que encuentren lo que están buscando. Para mejorar todo esto, la clave esta en utilizar el poder de la inteligencia artificial combinada con las capacidades de procesamiento de lenguaje natural. Es decir, poner el elemento humano de nuevo en una experiencia digital.
Al hacer esto, una tienda Ecommerce seria capaz de convertir una cantidad masiva de experiencias fallidas en conversiones exitosas. Por otra parte, el futuro de la tecnología de búsqueda se construye con inteligencia para que las marcas puedan entender los deseos, así como las necesidades de sus clientes, todo ello sin la necesidad de desplegar un vendedor físico para ayudar a todos y cada uno de los clientes.
El incremento en las transacciones, la satisfacción de los clientes, el incremento de la retención, así como el incremento de la conversión, son métricas que serian impactadas de forma positiva con la inteligencia artificial en el comercio electrónico.
Al proporcionar al Ecommerce una mejor comprensión y un toque más humano, se pone al descubierto la eficacia en la industria del comercio electrónico, la automatización y el conocimiento del consumidor.