Como empresa que eres, ya que tendrás un eCommerce, has de saber que hay muchas formas y modelos de montarlas. Una de ellas es el modelo freemium, ¿sabes a lo que nos referimos?
Si nunca antes has analizado este modelo, y sin embargo quieres ofrecerlo a tus clientes porque consideras que sería una diferenciación importante con respecto a los competidores, sigue leyendo porque te lo analizamos a fondo.
Qué es el modelo freemium
Lo primero que debes saber sobre el modelo freemium es que este se caracteriza por ofrecer productos gratis. Sin embargo, sería el producto básico. Para mejoras o por más funcionalidades, entonces se tendría que pagar.
Dicho de otro modo, habría dos niveles:
- Por un lado, el nivel gratuito (free) que es el que te da el acceso limitado.
- Por otro lado, el nivel premium que tendría más funciones.
Un ejemplo podría ser el de un robot. Como eCommerce, podrías ofrecer el robot gratis. Pero para programarlo, que se mueva, que haga cosas, etc. entonces habría que pasar al nivel premium.
Es decir, que tú ofrece la «base» gratis, pero realmente tu negocio está en que esas personas compren el nivel de pago que es donde realmente vas a ganar dinero.
El modelo freemium lo que busca es dar a los usuarios la oportunidad de que tengan un producto, y además gratis. Pero que, para sacarle el máximo rendimiento, tengan que pagar por esos servicios adicionales.
Su funcionamiento es bastante fácil de entender: Tienes un servicio o un producto que das gratis. Por ejemplo, Chat GPT. Todo el mundo que se registre puede usar tu programa. Pero pasado un tiempo, sacas una mejor versión, depurada, sin errores, más precisa, más eficiente… Y es de pago.
A todos los que has captado con la versión gratis tendrán dos opciones:
- Seguir con la gratuita a pesar de que esta está limitada.
- Pasarse a la de pago para seguir disfrutando de la herramienta pero con más privilegios.
Qué objetivo tiene el modelo freemium
Con todo lo anterior reciente, no hay duda de que estarás pensando que la inversión es demasiado, ya que ofreces algo gratis y luego has de confiar en que las personas pasen al nivel de pago. Y lo cierto es que así es. Sin embargo, hablamos de un modelo que busca bajar el coste de adquisición del cliente. Es decir, le das facilidades para que los clientes puedan usar tu producto y, si es lo bastante bueno, entonces los enganchas con nuevas funcionalidades y mejoras.
Vamos a poner otro ejemplo. Imagina que creas una consola y que decides regalarla a los clientes. Esta solo tiene un juego y además las funcionalidades están limitadas. Sin embargo, cada semana sacas nuevos juegos y, si quieren hacerse con ellos, tienen que pasar al nivel de pago para conseguirlos.
Tú solo regalas la «carcasa» pero lo cierto es que esa consola podría hacer mucho, mucho más. Es parecido a los juegos de móvil, donde tienes una parte gratuita y otra que debes pagar por ello.
Ejemplos de empresas con modelo freemium
Ahora mismo es posible que te vengan a la cabeza algunas empresas. O a lo mejor no. Pero seguro que alguna de las que vamos a citarte sí que te sonarán.
Canva
Canva es una de las herramientas más conocidas, tanto por diseñadores como para aquellos que intentan hacer las creatividades para publicar en redes sociales.
Pues bien, como sabes, Canva tiene una parte gratuita y, después, un modelo de pago, suscripción, por el que se liberan nuevas funcionalidades, herramientas…
Esto implica que, primero, los captas con lo que le ofreces gratis. Y si están contentos con ello al final acabarán usando la versión de pago.
Parecido a lo que ocurría antes. Tienes la versión gratuita donde puedes crear tu perfil, publicar, conectarte, buscar empleos… Pero, en la versión premium tiene mucho más.
Ventajas del modelo freemium
Después de todo lo que hemos hablado, tendrás ya en mente algunos de los beneficios que ofrece este modelo sobre otros. Pero, para que te quede claro, y teniendo en cuenta que la tasa de conversión no suele ser alta (entre el 1 y el 10%), sus ventajas serían las siguientes:
- El usuario puede probar el producto sin pagar por ello. Lo cual implica menos toma de decisión porque, al ser gratis, puede sentirse más relajado adquiriéndolo y más predispuesto a probarlo.
- Escalabilidad. En el sentido de que, conforme pase el tiempo, es posible que las necesidades de los usuarios cambien y que, si bien al principio no requieran nada extra, a la larga sí necesiten el nivel premium. Por ejemplo, actualizaciones importantes en los sistemas que sean gratuitas un tiempo y luego solo a nivel premium.
- Lo gratis llama. Todo el mundo querrá probar algo gratis y utilizarlo. Solo unos cuantos pagarán por todas las funcionalidades. Pero lo que está claro es que habrá más interesados y sonará más la empresa y la marca que si todo fuera de pago. Y eso implica más reconocimiento y visibilidad.
Ahora bien, a pesar de que las ventajas pueden ser muy tentadoras, has de tener en cuenta que hay algunos inconvenientes que siempre debes tener en cuenta:
- Atraer a clientes «erróneos». Es decir, personas que no entran dentro de tu target, pero que le gusta lo «gratis». Sabes que estos al final no te van a comprar y sería un gasto innecesario (que no vas a recuperar).
- Un negocio insostenible. En el sentido de que lo que necesitas es generar ingresos, y eso implica invertir en productos que vas a regalar esperando que la gente se anime a suscribirse. Además, si el producto gratuito no es suficientemente bueno no conseguirás despertar el interés por el premium, y si te pasas dando, puedes hacer que la gente no adquiera más funcionalidades si no las ve suficientes para invertir en ello.
Y hasta aquí te podemos contar del modelo freemium. Lo cierto es que hay muchas ideas de negocio que podrían encajar bastante bien en este. ¿Se te ocurre alguno o sería una buena idea para tu eCommerce?