De acuerdo con datos proporcionados por la Asociación francesa de ecommerce (Fevad), el comercio electrónico en Francia ha experimentado crecimientos de doble dígito en periodos recientes, con avances destacados en el primer trimestre y durante la primera mitad del año. En ese intervalo los minoristas registraron alrededor de 35 mil millones de euros en ventas, impulsados por una mayor adopción digital y la madurez del canal online. Esto se enmarca en el crecimiento del ecommerce en Europa.
Estos datos se pusieron en contexto en el evento Ecommerce París, donde se subrayó que el dinamismo del mercado se explica por el auge de las transacciones móviles y el crecimiento de los marketplaces.
También se destacó que las ventas generadas en marketplaces crecieron con fuerza, mientras que las ventas móviles mantuvieron un ritmo acelerado. Para Marc Lolivier, director general de Fevad, si la tendencia se sostiene, la facturación anual del ecommerce en Francia puede superar holgadamente las decenas de miles de millones de euros a corto y medio plazo.
En un segundo trimestre reciente se registraron más de 230 millones de transacciones online, un +20% interanual aproximado, con un importe medio por pedido cercano a los 75€. Aunque el ticket medio retrocede, la mayor frecuencia de compra y la base de compradores online en expansión compensan el efecto. De hecho, un comprador online realizó de media ocho pedidos trimestrales. Además, el número de sitios de ecommerce se incrementó con fuerza: se contabilizaron 189.240 tiendas online y se proyectaba alcanzar cerca de 200.000 en el corto plazo, un fenómeno comparable con los éxitos del ecommerce en diferentes países.
Tendencias de demanda y valor del pedido
Se observa un aumento de los pedidos de alto valor: una porción creciente de las compras supera los 50€, con especial tracción en electrónica y moda sostenible. Este cambio, acompañado de experiencias de compra fluidas y transparentes, impulsa la conversión y la fidelización. La omni-entrega refuerza la preferencia del consumidor: buzón y puerta siguen dominando, pero ganan peso nuevos métodos de entrega como puntos de paquetería, lockers y recogida en tienda. El modelo BOPIS puede elevar de forma notable la conversión según estudios sectoriales.
La claridad en los costes de envío es crítica: una mayoría exige precios visibles desde el principio, valora la entrega gratuita desde un mínimo y devoluciones sencillas. Esto reduce fricción, mejora la conversión y sostiene indicadores SEO. En posventa, el seguimiento en tiempo real es ya estándar: más del 80% de los compradores consulta el estado del pedido por SMS o apps, y operadores como Colissimo o Chronopost refuerzan tecnologías de tracking; la IA logística aporta visibilidad y confianza.
La sostenibilidad es decisiva para más del 60% de los consumidores: pesan los envíos de bajo impacto, embalajes reciclables y compromiso ambiental. Marcas con iniciativas como envíos neutros en carbono mejoran reputación y rendimiento orgánico; forma parte de la evolución del ecommerce.
Pagos, seguridad y tecnología
Los pagos instantáneos se consolidan como nueva norma regulatoria en Europa, mejorando tesorería y experiencia. Iniciativas como Wero (EPI) aspiran a captar cuotas relevantes en pocos años. El BNPL 3.0 madura bajo marcos que exigen transparencia y evaluación de solvencia, elevando conversión en categorías premium. El Open Banking (PSD2/PSD3) habilita transferencias directas más económicas y seguras. La IA antifraude ahorra miles de millones globalmente con detección en tiempo real.
Emergen pagos biométricos, stablecoins en aceptación gradual, tarjetas virtuales efímeras recomendadas por organismos de ciberseguridad y el auge de super apps financieras. La orquestación de pagos unifica métodos (tarjeta, transferencias, wallets, BNPL, cripto), optimiza rutas, mejora autorización y asegura cumplimiento (RGPD, PCI DSS).
Estructura del mercado y operaciones
El mercado francés abarca B2C, B2B y C2C, con un B2B que gana peso por su integración con ERP/CRM. Por categorías, electrónica de consumo lidera por innovación y conectividad (5G, wearables), seguida de moda con foco en personalización y responsabilidad. El m-commerce continúa escalando, por la elevada penetración de smartphones y apps.
En ventas, el ecosistema es omnicanal: la tienda propia (CMS) convive con marketplaces y ventas privadas. La complejidad multi-canal exige OMS para consolidar pedidos y stock en tiempo real, y TMS para conectar múltiples transportistas. Muchas compañías operan multi-almacén (propios y 3PL/fulfillment), con herramientas que dirigen pedidos al origen óptimo. La preparación de pedidos y la capacidad de envío en el día siguen siendo palancas de satisfacción; el SAV gestiona decenas de incidencias mensuales, mitigables con procesos y tecnología.
Francia mantiene un crecimiento sostenido del ecommerce sustentado en demanda móvil, logística flexible, transparencia en costes, sostenibilidad y pagos de nueva generación. Las marcas que integren seguimiento proactivo, opciones de entrega diversas, orquestación de pagos y contenidos orientados a confianza maximizarán conversión, fidelidad y visibilidad orgánica, capitalizando un mercado con potencial para duplicar su tamaño en el medio plazo.
